domingo, 28 de noviembre de 2010

Díficil


Lisa y Carrol yacen en la mesa.

No me gusta eso...

Este lugar es tan joven.

¿Y hay pasto de más?

Lisa y Carrol siguen en la mesa.

Eso no me gusta.

Y todo parece verse tan bien.

Parece no importar.

Trata de recordarme Lisa, Carrol.

La razón por la que olvido lo que digo.

Mi morir tan rápido.

Ver la tele sin sentir que algo falta...

Mi forma de caminar...

....

al no ver atrás.

Todo se cae.

No puedo recordar.

No puedo ser invisible.

Dije lo correcto y actué mal.

Lisa, Carrol ¿Qué debo hacer?

Traté de tomar el control.

Pero no lo veo de esa manera.

No, nunca.




lunes, 22 de noviembre de 2010

Ciclo.

Un círculo se dibuja en cada acción de las personas. De éstas depende de que color es la figura, de cuan marcado está en sus costumbres.

Yo tengo un círculo, el cual tiene otros círculos escondidos bajo la linea del contorno que parece tan delgada, tan frágil

Y en esa forma hay un infinito, donde ni siquiera hay principio, un retrato.

Espero borrarlo, aquel maldito parámetro, esa linea destructiva, que parece tan tranquila.

Una curva que nunca termina por cerrarse, guardando un vacío, que sólo existe en los ojos de quién los mira.

Sí. Ese círculo, ese ciclo, es un vicio.

sábado, 13 de noviembre de 2010

?


Quise ser buena.

Aprendí a serlo, a tener gentiles gestos, dulces ojos y sonrisa poliforme.

A sentirme ligada con los demás, a ser comprensiva...

Ahora entiendo, que a nadie le importa eso.

Los demás sólo les gusta presionar las llagas de otros, para ver si las suyas se cierran.

O son indiferentes al que busca compañía.

¿No intuyen la voz del extraño que desea ser amigable?

Entre más oscuro se vuelve todo, más parece que hay un cielo azul extendiendose afuera.

¿Y nosotros, cuando saldremos?

miércoles, 3 de noviembre de 2010

¿Me odias?


Hoy te enojaste.

Tu cara cambió por un instante. Contrajiste las cejas y frunciste los labios.

Por lo que dijiste, dejaste ver lo que piensas de mi comportamiento.

Te desagrada, y tus palabras correctas mostraron la sincronia, que seguramente repasabas cada vez que yo actuaba de la forma que pareces tu despreciar.

Pero yo no siempre fui así... te hable ¿recuerdas? te pregunte que sucedía...

Y tu frialdad, tristemente confundida por tus ojos con madurez me tomó por sorpresa al contestarme.

Crees que te molesto...lo sé. Todos los que amo piensan eso al final.

No te culpo por ello...

Pero tu no te preguntas...yo sí.

Ninguna hizo nada malo.

Simplemente tu eres más fría, yo más emotiva.

Y si algún día te da la curiosidad de saber porque ya no estoy a tu lado, podrías buscar en tus memorias vagas y tal vez, te encontrarías con la respuesta que para ese entonces sería sólo algo, un recuerdo, que por más emoción contenida se habría oxidado, y a secas diría así:

Puta.

¿Me odias ahora?